Protege a tu mascota de las enfermedades propias del invierno

En la época invernal algunas enfermedades son más frecuentes por darse las condiciones idóneas. El aire frío perjudica el aparato respiratorio, haciendo que virus y bacterias puedan colonizarlo con más facilidad y que se hagan más patentes problemas no infecciosos. Las enfermedades típicas de esta temporada en perros y gatos son:

• Traqueobronquitis infecciosa o tos de las perreras.
• Bronconeumonía.
• Faringitis y laringitis.
• Asma felina.

¿Cuáles son los síntomas?

Los síntomas que presentan las mascotas cuando tienen un resfriado se parecen mucho a los que sufrimos los humanos. Es normal que manifiesten estornudos, tos, ojos llorosos, pérdida de apetito y dificultades respiratorias. Además se dan otros síntomas que podrás reconocer fácilmente:

• Falta de interés por el juego.
• Desinterés por la actividad física.
• Cansancio.

¿Cuáles son los animales más vulnerables?

Debido a su fisiología o edad, los animales más vulnerables son:

• Cachorros
• Perros o gatos mayores
• Razas pequeñas
• Con poco pelaje
• Perros o gatos que hayan o estén sufriendo problemas respiratorios

¿Cómo prevenir estas enfermedades?

• Abriga al animal, sobre todo si es friolero o tiene poco pelo.
• Si está fuera de casa, que tenga un lugar caliente donde resguardarse del frío.
• Seca siempre bien su pelaje si viene de estar bajo la lluvia.
• Evita al animal los cambios bruscos de temperatura.
• Mantén al día su calendario de vacunación.

¿Qué puedo hacer si presenta síntomas?

La principal recomendación es aplicar el sentido común y acudir a la clínica o centro veterinario para obtener el diagnóstico adecuado y poder descartar otras enfermedades o patologías más graves. 

¿Qué medidas debo adoptar en casa?

Una vez pautado y prescrito el tratamiento adecuado por el especialista, tu papel se basa en llevar a cabo unos cuidados básicos.

1. REPOSO

Su cuerpo necesita reposo y poca actividad para curarse bien. La parte más afectada durante este proceso es la garganta y el sistema respiratorio. Por este motivo se les quita el apetito y respiran con dificultad. Deja que el animal vaya a su ritmo sin agobiarle ni obligarle a salir a la calle o a moverse si no quiere.

2. CUIDADO CON EL FRÍO

Tienes que evitar que el animal pase frío. Para ello, debes mantener su zona de confort caliente, evitando el aire frío. Se recomienda tener una mantita en su cama para que se pueda tapar cuando esté durmiendo. Evita sacarle a la calle si han bajado las temperaturas de forma brusca o si llueve. Es muy importante que el perro esté seco siempre, si está mojado puede ponerse peor. A la hora de sacarle a pasear ten cuidado de que no se contagie con otros virus de otros perros. Su sistema inmunológico está muy débil y es muy fácil que pueda contagiarse de otras bacterias con facilidad.

3. HIDRATACIÓN

La hidratación es básica para que se mejore con rapidez, así como para que el proceso de catarro sea más llevadero. Por otro lado, puedes permitir que el animal entre en el baño cuando te duchas, así puede respirar aire húmedo que le ayudará a fluidificar los mocos, disminuir la irritación y aliviar la congestión nasal.

4. CONTROLAR SU ALIMENTACIÓN

El resfriado afecta al sistema respiratorio del perro, originando una inflamación en las zonas por las que pasa la comida. Es frecuente que tenga dificultades para ingerir alimentos y rechace la comida, pero debe ingerir alimentos para la recuperación de su sistema inmunológico. Puedes recurrir a un extra de vitamina C a base de suplementos para mejorar sus defensas.

5. EVITAR CONTAGIOS

Si en la casa conviven varios perros o gatos es muy fácil que se contagien. Procura limitar el contacto con otros animales enfermos y lavar los juguetes, los platos de comida y los cuencos de agua con frecuencia.

Recuerda que no debes preocuparte por el contacto con el animal, el resfriado no se transmite de perros a humanos, ni viceversa.