Cinco ejercicios 'mindfulness' para tu día a día

Más de una vez has escuchado el significado del mindfulness como la focalización de la atención en el momento presente, conseguir la atención plena, centrándonos en lo que está sucediendo “aquí y ahora”, aceptándolo sin más, sin intentar cambiar, ni juzgar nada. En resumen, concentrarse en lo que sucede en nosotros y en nuestro alrededor y saber renunciar al ruido y a las distracciones.

De sus beneficios ya hablamos en un post publicado recientemente “Mindfulness o atención plena”. En esta ocasión, nos centramos en cinco ejercicios concretos para practicar mindfulness que puedes realizar en tu día a día con el objetivo de obtener bienestar y calma. 

1. DESAYUNO MINDFULNESS

Consiste en hacer un desayuno consciente. La práctica comienza desde el momento en el que lo estás preparando. Hazlo despacio, sin prisa; si vas a preparar el café, disfruta de su olor desde el momento en el que abres el paquete, deja que tu cuerpo se llene del aroma mientras lo preparas, presta completa atención a todo el proceso, como si tuvieses todo el tiempo del mundo. Igual con el resto de alimentos que suelas consumir en el desayuno: zumo, tostadas, cereales, etc.

Por último, siéntate y tómalo despacio, consciente de ese primer momento del día.

2. AUTO-CHEQUEO

Haz una pausa y evalúa el estado de tu cuerpo y de tu mente. ¿Cómo es tu postura? ¿Estás apretando las mandíbulas? ¿Tienes sed? Te sorprenderá lo que aprendes acerca de ti a través de estos registros si los practicas regularmente. Prueba a introducir estos mini chequeos más o menos cada hora. Si te sirve, puedes ponerte algún tipo de alarma que te avise.

3. JUEGO DE LA OBSERVACIÓN

Dentro del espacio donde te encuentres, elige el objeto que quieras y enfoca tu vista en él. Procura describirlo sin usar adjetivos calificativos y detalla su forma, tamaño, color, textura, longitud; mantén la vista algunos minutos. Este ejercicio puede parecer sencillo a primera vista, pero es posible que notes con cuánta facilidad tu mente se distrae. Si esto ocurre y te pierdes en tus pensamientos, no pasa nada, pues alcanzar la atención plena lleva tiempo. 

4. EJERCICIO DE LA VELA

Para este ejercicio de mindfulness necesitas una vela y diez minutos de tu tiempo para realizarlo. Selecciona el lugar donde puedas realizarlo y una vez lo encuentres, enciende la vela frente a ti. Una vez encendida, observa detenidamente la llama. ¿De qué color es? ¿Cuál es su forma? Observa los cambios en el color, en sus movimientos y en su forma.

5. FOTOGRAFIAR UN MOMENTO

Una fotografía es la mejor manera de estar presente, con todos tus sentidos despiertos, para retratar, no solo un momento, sino las sensaciones que experimentas. Para esto no es necesario invertir mucho tiempo, con 3 minutos bastará.

Un ejercicio sencillo que requiere concentración, atención plena y constancia. Para realizarlo de la forma correcta solo debes:

• Elegir el lugar que más te guste y un momento del día.
• Para que no se te olvide, puedes ponerte una alarma que te recuerde que es la hora de la foto.
• Mira el lugar que seleccionaste durante unos minutos, observa, respira y dispara la fotografía para inmortalizar el momento de atención plena.

Durante el proceso de fotografiar, puedes hacerte preguntas como: ¿Qué colores, olores, sonidos y temperatura percibes? ¿Cuál es tu estado de ánimo en este instante? ¿Cómo te sientes?

¿Qué te parecen los ejercicios que te proponemos? Empieza ya a practicarlos. Busca tu momento de atención plena.