Cómo elegir la faja lumbar adecuada

“La espalda me está matando”, “no puedo más con los dolores de espalda, ¿qué puedo hacer?” Seguro que más de una vez has oído o tú mismo has pronunciado una de estas frases. Tranquilo, no eres el único y no estás solo. Hoy en día, muchas personas sufren dolores de espalda y el 80% puede padecer algún tipo de dolor lumbar durante el transcurso de su vida. 

Para aliviar o disminuir este tipo de dolores son muchos y muy variados los consejos, remedios, hábitos saludables, etc., a los que se puede recurrir. En este artículo te vamos a hablar de uno de ellos, la faja lumbar, también llamadas ortesis lumbo-sacras o dorso-lumbares. 

En primer lugar, cabe destacar la importancia de identificar el tipo de dolor que tienes y en función de ese tipo de dolor, el mercado te ofrece diferentes tipos de fajas, que podrás encontrar en tu farmacia más cercana. Si necesitas más información, pregunta a tu farmacéutico, que te ayudará a elegir, te contará los beneficios de la faja lumbar y las precauciones sobre su uso.

A continuación tienes un aperitivo para hacerte una idea aproximada. 

Tipos de dolores

Primero de todo, es importante identificar el tipo de dolor de espalda.

Dolor agudo. Dura menos de seis meses y se caracteriza por ser más global. Para este tipo de dolor se pueden utilizar fajas pero, por norma general, las molestias desaparecen con la actividad física y las terapias de calor.

Dolor reflejo visceral. Este dolor es muy constante, mejora nítidamente con el movimiento y empeora con el reposo. Por lo tanto, para esta tipología en concreto no es necesario el uso de fajas.

Dolor articular. En este caso, sentirás como si un rayo recorriera tu espalda y te dificultara el movimiento, síntomas que puedes aliviar con ayuda de una faja lumbar.

Dolor crónico. Suele durar más de seis meses y no mejora con las fajas lumbares, por lo que se recomienda acudir al médico

Beneficios del uso de una faja lumbar 

• Permite aliviar el dolor de espalda ya que los discos intervertebrales no reciben la misma carga (que es lo que provoca este dolor), permitiendo así equilibrarlas.

• Evita una mala postura. Cuando utilizamos una faja el rango de los movimientos se reduce y tenemos por consiguiente que adaptarnos y cambiar nuestras malas costumbres.

• Estimula los músculos de la espalda creando una presión (hacia arriba/abajo) que contribuye al estiramiento muscular.

El uso de las fajas debe estar acompañado de una buena higiene postural y el fortalecimiento de la musculatura lumbar

Precauciones sobre su uso

• La faja lumbar permite un descanso parcial de la columna lumbar, pero esto no significa que deba ser utilizada todo el tiempo. El uso prolongado de este tipo de fajas no es aconsejado pues los músculos de su espalda deben de ser trabajados y fortalecidos naturalmente. 

• No utilizar durante la noche, ya que esto podría interrumpir el sueño debido a la presión ejercida y causar molestias. 

• Una vez que el dolor haya pasado, no seguir utilizando la faja ya que puede tener consecuencias negativas al no fortalecer sus músculos. 

• El uso de la faja debe limitarse en las personas mayores ya que puede llegar a causarles desgaste muscular o descalcificación. 

Tipos de fajas lumbares

Faja lumbar ortopédica clásica (5mm)

Son aquellas que los expertos recomiendan en el caso de que se quieran tratar ciertos trastornos como lumbalgia, reuma, dolores agudos y crónicos que afecten a la columna, dolores relacionados con el cambio de clima, hernias, espondilosis, etc.

Fajas lumbares deportivas

Ideales para lograr una correcta sujeción en el caso de que hayan protrusiones discales. Se diseñan en materiales transpirables de alta calidad, logrando una correcta adaptación en cualquier caso.

Fajas lumbares de alta compresión

Muy utilizadas para el tratamiento de dolores naturales que se producen en las articulaciones, en lesiones de músculos de la espalda o bien para post-cirugías.

Fajas lumbares reforzadas con 4/5 varillas

Recomendadas para post cirugías de espalda.

Cómo elegir y cuidar tu faja lumbar

• Asesórate a través de un profesional que te pueda recomendar un modelo de ortesis en base a tu situación y a tus objetivos. En tu farmacia más cercana   puedes encontrar asesoramiento.

• Elige siempre una faja de acuerdo a tu talla.

• Las fajas elásticas son las más recomendables, ya que ayudan a corregir la postura y facilitarán el movimiento en ciertas actividades.

• Lava siempre a mano tu faja, y déjala secar a temperatura ambiente extendida en una mesa o superficie plana.