Se considera hemorragia o sangrado posparto la pérdida de sangre acumulada mayor o igual a 1.000 mililitros. Esta pérdida de sangre puede estar acompañada de signos o síntomas de hipovolemia dentro de las 24 horas posteriores al parto. La hipovolemia se produce ante una disminución del volumen sanguíneo por una hemorragia o una deshidratación.
Es importante recordar que el sangrado posparto continúa siendo la principal causa de mortalidad materna en todo el mundo.
Tras el parto, el útero se contrae de forma natural para expulsar la placenta y en ese proceso los vasos sanguíneos que riegan la zona pueden provocar una hemorragia, dependiendo de la fuerza de las contracciones. Además, la causa del sangrado posparto también puede estar en pequeños trozos de placenta que se han quedado adheridos al útero.
A estas causas del sangrado posparto hay que añadir las siguientes:
La cantidad de sangre que se pierde tras el parto oscila entre 500 y 1.000 mililitros, dependiendo de si el parto es por vía vaginal o por cesárea. Es difícil calcular la pérdida de sangre en el sangrado posparto, que, aunque generalmente se produce tras el parto, puede aparecer días o semanas más tarde.
La duración del sangrado posparto varía en cada mujer, pero suele durar unas seis semanas, lo que se conoce como cuarentena. A medida que pasan los días, el color del sangrado posparto cambia desde un tono más rojo a blanquecino, pasando por amarillento.
Hay que recordar que el sangrado posparto disminuye, en la mayor parte de las mujeres, tras la primera semana del parto, pero puede volver a producirse en las semanas posteriores, cuando empieza a cicatrizar la zona donde se desprendió la placenta.
Las compresas tocológicas cuentan con un núcleo absorbente de algodón hidrófilo, una capa especial de algodón impermeable y una malla envolvente de hilo de algodón para una correcta absorción del sangrado posparto. En Welnia dispones de una amplia gama de compresas tocológicas donde elegir.
El control del sangrado posparto se efectúa en las sucesivas consultas médicas posteriores al parto. No obstante, puede que surjan algunos problemas que hagan necesario acudir a urgencias. Estos son los más frecuentes:
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