Lentejas con arroz y salmón

Dificultad: fácil

Duración: 50 minutos (más las 6 horas de remojo)

Valor energético: 445 kcal/ración

Cantidad: 2 personas

Alérgenos: pescado

En el artículo Platos de cuchara: ¿cuáles son los más saludables?  ya te hablamos de las cualidades gastronómicas y nutricionales de los platos de cuchara y, en especial, de los guisos con legumbres.

Los guisos con legumbres suelen ser elaboraciones con mucha tradición culinaria y cultural que nos conectan y nos hacen sentir parte de una tradición. Nos dan seguridad y confort y nos conectan con nuestra familia y antepasados.

Hoy vamos a hablar de lentejas porque la receta que te traemos tiene a esta legumbre como protagonista. Las lentejas son uno de los primeros cultivos que se conocen en la historia y ya las disfrutaban hace más de 6000 años en Egipto, donde eran consumidas por los estratos más poderosos como símbolo de poder, como muestra su inclusión en algunos ajuares funerarios. Incluso se conserva una receta de lentejas escrita en papiro del año 300.

Actualmente, el país con mayor cultivo de lentejas es Canadá, seguido de la India. Y este alimento forma parte de los platos más tradicionales en países africanos, europeos, asiáticos y americanos. A su interés culinario se le une que su cultivo es sostenible y, por supuesto, su interés nutricional.

Lentejas con arroz blanco y salmón: ¿qué nutrientes aportan?

Las lentejas, principalmente, son hidratos de carbono, y necesitamos que el 60 % de las calorías que consumimos en un día provengan de carbohidratos para que nuestro cuerpo funcione correctamente y no tengamos fatigas o mareos. Concretamente, las lentejas contienen hidratos complejos, que son los que nuestro organismo descompone poco a poco, sintiéndonos con fuerza y saciados más tiempo y evitando picos de glucosa.

También suponen un aporte de proteína de alto valor biológico, fibra, hierro, folato y potasio. Cuando las mezclamos con cereales como el arroz, con un extra de proteínas y algunas verduras, como en la receta que te traemos, forman un plato nutricionalmente redondo. Si ese extra de proteína es, como aquí, salmón, mucho mejor que si le añadimos chorizo o morcilla, ya que es un producto animal rico en grasas buenas (omega 3) frente a las grasas saturadas de los embutidos.

Cocina esta receta por tu salud, pero, sobre todo, hazlo porque te prometemos que está buenísima.