Una dieta rica y equilibrada debe incluir pescado, al menos tres raciones a la semana. ¡Pero ojo! Hay que tener cuidado con el contenido de mercurio en el pescado. De lo contrario, corremos el riesgo de ingerir cierta cantidad de mercurio de una forma inadvertida.
Según un estudio del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), los pescados que menos mercurio contienen son la sardina, el boquerón, el besugo, la dorada y el calamar, frecuentes en el mercado de España.
El consumo excesivo de mercurio en el pescado puede dañar:
Hay que prestar especial atención a las mujeres embarazadas y a los niños porque son los grupos de población en los que más daño puede hacer el mercurio en el pescado.
Te preguntarás cómo puede el mercurio alojarse en el pescado y suponer un riesgo para la salud. Esto se debe a que el mercurio puede recorrer largas distancias y quedarse en el ecosistema de las aguas, donde lo absorben los peces y otros organismos de los que se alimentan los peces. Por eso, la mayor parte del mercurio que consumimos es a través del pescado y del marisco.
El mercurio se puede encontrar en el medio ambiente en estas tres formas:
La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria, EFSA en sus siglas inglesas, indica que se puede consumir a la semana una cantidad de metilmercurio de 1,3 microgramos/kilogramo de peso corporal, y de mercurio inorgánico de 4 microgramos/kilogramo de peso corporal.
El mercurio inorgánico en los alimentos no supone ningún problema para el consumidor, ya que la exposición no excede la ingesta semanal tolerable, mientras que con el metilmercurio no sucede lo mismo.
Los pescados que contienen una mayor cantidad de mercurio (1,00 miligramo/kilogramo) son:
Los que tienen una menor cantidad de mercurio o están casi libres de mercurio (0,30 miligramos/kilogramo) son:
El resto de peces comestibles contienen una cantidad media de mercurio de 0,50 miligramos/kilogramo.
Para intoxicarse por el mercurio presente en el pescado hay que comer una gran cantidad de los pescados que tienen más mercurio en su interior. Existen diferentes síntomas para intoxicaciones por los distintos tipos de mercurio, pero los más comunes para el mercurio presente en los pescados son los siguientes:
Comer pescado y marisco tiene innumerables beneficios para la salud por su alto contenido en proteína y cantidad de ácidos grasos insaturados omega 3 y 6. Por ello, la Agencia Española de Seguridad Alimentaria recomienda a la población general consumir entre 3 y 4 raciones de pescado variado a la semana, que incluya pescado blanco y azul.
Las embarazadas y los niños menores de 10 años deben evitar el consumo de los tipos de pescado con mayor cantidad de mercurio, mientras que los niños de entre 10 y 14 años deben limitar el consumo de dichos pescados a 120 gramos al mes.
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