Incontinencia urinaria: aprende a controlarla y mejorará tu bienestar general

La Incontinencia Urinaria (IU) es definida por la International Continence Society (ICS) como “molestia derivada de cualquier escape involuntario de orina”. La IU es una condición que se presenta con bastante frecuencia en la población y que afecta a personas de los dos sexos y de todas las edades, aunque cabe destacar que las mujeres son más propensas que los hombres. ¿Por qué? Para comenzar, por factores anatómicos. La uretra femenina es más corta que la del hombre y eso ayuda a ser más propensa a la incontinencia. Otros factores pueden ser la edad, el sobrepeso, la maternidad, la menopausia o incluso el hábito de aguantar hasta el último segundo puede favorecer la aparición de infecciones urinarias y pérdidas de orina.  

Tipos de incontinencia

• Incontinencia de esfuerzo: es el tipo más frecuente entre las mujeres y representa la mitad de todos los casos de incontinencia. Es una pérdida involuntaria de orina asociada a un esfuerzo físico (toser, reír, andar, correr…).

• Incontinencia de urgencia: ocurre cuando una persona tiene ganas de miccionar y sufre escapes de orina antes de llegar al cuarto de baño. Las cantidades y frecuencia de las pérdidas suelen ser variables y, en cualquier caso, mayores que en la incontinencia de esfuerzo.

• Incontinencia mixta: es una combinación entre los dos tipos de incontinencia: de esfuerzo y la de urgencia.

Medidas para controlar la incontinencia urinaria

Lo primero que te recomendamos es priorizar la visita o consulta al médico si fuera necesario para un correcto diagnóstico. Una vez valorada esta opción, tú misma puedes trabajar determinados hábitos que te ayudarán a controlar la incontinencia:

1. Disminuye el consumo de café y de productos con cafeína, ya que hay estudios que demuestran que la cafeína provoca más ganas de miccionar.
2. Evita el alcohol, los alimentos altos en ácido y las comidas picantes, que pueden irritar la vejiga.
3. Elige alimentos ricos en fibra, que te ayudarán a evitar el estreñimiento.
4. Trata de mantener un peso saludable.
5. Es preferible que bebas mucho líquido poco a poco, a lo largo del día, y no todo junto de un tirón, ya que puede ser demasiado para que la vejiga pueda procesarlo bien.
6. Usa ropa que sea fácil de quitar cuando llegues al baño.
7. Aprende a dominar los músculos de la vejiga y a fortalecerlos. Para eso existen ejercicios especiales, como los ejercicios de Kegel, que pueden ayudarte a controlar la orina. También llamados de entrenamiento de suelo pélvico, son unos ejercicios que se basan en contraer y relajar los músculos del suelo pélvico repetidas ocasiones, con el objetivo de incrementar su fuerza y resistencia. Se pueden realizar en casa.
8. No fumes, además de los muchos problemas de salud asociados al tabaco, este hábito puede provocarte tos, que aumenta las posibilidades de que sufras pérdidas de orina.
9. Lleva un registro diario de tus síntomas y de las situaciones que se asocian a tu incontinencia urinaria. Esto le será de gran ayuda a tu médico a la hora de encontrar el tratamiento más apropiado para ti.
10. Utiliza absorbentes, si es necesario. En la actualidad existen absorbentes discretos que absorben la humedad y combaten el problema del olor, disponibles en farmacias. Puedes encontrar una amplia gama de absorbentes muy eficaces que se adaptan a las características de cada persona y a su tipo de incontinencia permitiendo mejorar su calidad de vida.

Busca la solución adecuada para la incontinencia urinaria y no dejes de reír, caminar, correr, saltar y bailar.